20.11.2019. Germán Serrano, titular del juzgado de lo social número 2 de Vigo, es juez decano desde 2009. Tras diez años en el cargo valora de forma positiva la respuesta de los tribunales de la ciudad ante el alto número de asuntos ingresados y señala a los procuradores como un elemento clave de su funcionamiento. “Los procuradores están llamados a asumir determinadas funciones de ejecución de sentencias que aliviarían la sobrecarga que en esta materia puede haber en determinadas juzgados”, explica el juez decano.
PREGUNTA. ¿Qué le impulsó a ser juez decano y continuar 10 años después?
R: La profesión de juez es dar un servicio público. Y el ser juez decano, además de que me permite representar con orgullo al resto de compañeros, es una proyección más de esa vocación de servicio.
¿Cómo ha cambiado la administración de Justicia en la última década?
Todavía nos falta mucho terreno por ganar. Estamos en plena implantación del expediente judicial electrónico, se han creado nuevas dotaciones judiciales, tenemos una nueva sede judicial que se está construyendo… En estos diez años ha habido mejoras, pero todavía nos queda terreno por recorrer para que se deje de visualizar la Justicia como la hermana pobre de la administración, donde casi nadie quiere invertir. Aunque Galicia en materia de nuevas tecnologías y equipos informáticos está entre las primeras comunidades de España.
¿Qué horizonte marca la Cidade da Xustiza?
La nueva Cidade da Xustiza tiene que ser tecnológica. Aspiro a que traslademos el menor papel posible y que esté dotada con salas para videoconferencias, sistemas de grabación y las herramientas necesarias para que el expediente digital se pueda visualizar en sala. Tiene que ser moderna, eficaz y transparente, con todos los servicios básicos iniciales al alcance de la mano del ciudadano.
¿Cómo valora la figura de los procuradores?
Los procuradores son fundamentales en la administración de justicia actual. Hay que reconocer el esfuerzo que han hecho en la implantación del sistema Lexnet, en el que son uno de los actores principales. Los procuradores están llamados a asumir determinadas funciones de ejecución de sentencias que aliviarían la sobrecarga que en esta materia puede haber en los juzgados.
Los procuradores solicitan ejecutar la parte civil de los asuntos penales, ¿es ahí donde tendrían un nuevo papel?
La intervención del procurador en la ejecución es ya importante. A nivel legislativo, se le podrían ampliar ciertas competencias, sobre todo cuando hay condenas pecuniarias para diligenciar con mayor eficacia la búsqueda de bienes y de cuentas corrientes para saldar la deuda. Para conseguirlo sería necesaria una reforma legislativa a nivel nacional. El papel de los procuradores ahí podría ser muy importante.
Vigo está entre las ciudades que más asuntos ingresa por habitante entre las de su tamaño ¿Por qué somos tan litigantes?
No creo que los ciudadanos de Vigo y su área metropolitana litiguen más que los de otros partidos judiciales. Vigo es el partido judicial más grande de Galicia y genera trabajo por la cantidad de habitantes que tiene y por su gran actividad económica y empresarial, que también genera conflictos. A nivel legislativo, deben implantarse ciertas medidas que reduzcan la litigiosidad innecesaria y eviten que lleguen al juzgado asuntos que pueden resolverse fuera de la jurisdicción. En el caso de las cláusulas suelo, por ejemplo, ya hay miles de sentencias en España han determinado una solución para ciertos contratos hipotecarios y sin embargo, se sigue litigando.
¿Más mediaciones y menos pleitos ayudaría?
Letrados, jueces y procuradores debemos lanzar un sistema eficaz de mediación que pueda ayudar a las partes a llegar a una solución. Llegar a una solución siempre será mejor que una sentencia, aunque los jueces estamos para resolver los problemas de los ciudadanos.
Vigo tiene casi 20.000 asuntos en trámite ¿Qué se puede hacer para acabar con ese atasco?
Las ratios de respuesta de los juzgados de Vigo son muy altas en tiempo y el grado de pendencia es muy bajo respecto a otros partidos judiciales de Galicia. En Vigo, pueden señalarse en 2-3 meses la vista y juicio de una demanda civil, contenciosa o social. Eso en términos judiciales, es muy rápido. A 30 de septiembre habían entrado en el decanato de Vigo 200.000 escritos entre demandas y escritos de trámite. Son muchísimos, pero me quedo con la respuesta fluida y rápida de los tribunales. Y más teniendo en cuenta que todos sobrepasan el módulo de trabajo ordinario que el consejo tiene previsto para cada juzgado.